ZAMORA, 3 Oct. - Castilla y León está a la espera de una comunicación oficial de las autoridades para abordar el caso de la gastroenteritis que ha afectado a los vecinos de Tarazona, en Zaragoza, durante las últimas tres semanas. Hasta ahora, alrededor de 500 residentes de Tarazona y sus alrededores han experimentado síntomas como diarrea, vómitos y fiebre debido a esta enfermedad.
El consejero de Sanidad de la Junta, Alejandro Vázquez, señaló este martes que están a la espera de recibir información oficial sobre las circunstancias de este brote. El Gobierno de Aragón mencionó ayer la presencia de quistes del protozoo 'Crystosporidium' en ciertas áreas del río Queiles, que se encuentra dentro del territorio de Castilla y León.
A pesar de esta información, Vázquez ha enfatizado la necesidad de ser cautelosos mientras no haya noticias directas sobre este tema. Se menciona también que el río Queiles nace en la provincia de Soria y que, según los investigadores del caso, la fuente del brote podría estar en dicho territorio.
Vázquez ha informado que el Seprona y la Policía Judicial ya han tomado medidas en relación a este incidente. Por su parte, la Junta de Castilla y León está a la espera de instrucciones precisas sobre cómo colaborar en la investigación.
El consejero ha dejado claro que Castilla y León tomará medidas dentro de sus competencias respecto a este caso, ya que el río Queiles es parte de la Confederación Hidrográfica del Ebro. El objetivo es esclarecer los hechos que han provocado esta epidemia de gastroenteritis en el entorno de Tarazona.