VALLADOLID, 7 Oct.
La patronal CEOE Castilla y León, frente a la presentación del
Proyecto de Ley de Presupuestos Generales del Estado para 2023, considera "inadmisible" la posición adoptada por el Gobierno de "elegir de forma unilateral y a espaldas del Diálogo Social nacional" una subida de un 8,6 por ciento en las bases máximas de cotización, lo que considera "un duro golpe al tejido productivo".
En un aviso remitido a Europa Press, CEOE Castilla y León ha advertido de que hay "una mesa concreta con interlocutores sociales para tratar este tema", la que se reunió "por última vez el pasado lunes", sin que a CEOE nacional "se trasladase nada sobre este tema, con lo que la resolución adoptada es impresentable y desvaloriza el Diálogo Social".
Para la patronal, en un contexto en el que el Gobierno "insiste a los agentes sociales" para convenir un pacto de rentas, "no se comprende que exactamente el mismo Ejecutivo tome resoluciones unilaterales en puntos que afectan a este de manera importante".
En este contexto, CEOE Castilla y León comprende que estos
Presupuestos "deberían apostar de manera decidida y verdadera por el
acompañamiento a la actividad de las compañías", quienes a través del avance
de su operativa "son las que asimismo sostienen y crean
empleo", aparte de ser "los que contribuyen a la generación de riqueza y, por medio de su aptitud de innovación, a la optimización del
confort económico y popular".
CEOE ha advertido de que acrecentar las cotizaciones sociales y
poner "una carga aún mayor sobre las compañías es un grave fallo",
ya que "va a tener efectos dañinos sobre el empleo", en la medida en que de esta
forma los costos socios al aspecto trabajo "aumentarán mucho más de un
nueve por ciento sumando la subida del 0,6 incluida en el Mecanismo de
Igualdad Intergeneracional (MEI)" en un contexto de "deterioro
económico y también indecisión extendida".
Este "nuevo golpe al tejido productivo", contemplado en las medidas
agarradas en este Proyecto de Presupuestos, "preocupa y de manera
preocupante" a la patronal, ya que "semeja haber caído en el olvido el esencial sobreesfuerzo que realizaron las compañías españolas a lo largo de estos últimos años para sostener el empleo y amortiguar, mucho más a corto plazo, la escalada de la inflación".
"Este nuevo mazazo a la actividad productiva, especialmente en un
instante en el que las arcas del Estado muestran una recaudación
récord, crea nuevamente desconfianza en las compañías y también inseguridad
jurídica y piensa un insignificante obstáculo a la competitividad y al
desarrollo económico, siendo éstas las palancas que sostienen ese
Estado del confort que se quieren mantener con medidas tan
exentas de rigor económico", concluye CEOE Castilla y León.