VALLADOLID 20 Nov. - La situación demográfica de Castilla y León se torna preocupante, ya que durante el año 2023 se han contabilizado un total de 12.496 nacimientos, lo que representa una drástica disminución del 4,86 por ciento en comparación con el año anterior, es decir, un descenso de 639 nacimientos. Este retroceso es casi el doble de la media nacional, que se sitúa en un descenso del 2,61 por ciento, haciendo que Castilla y León exhiba el cuarto mayor descenso de nacimientos entre todas las comunidades autónomas de España.

Este lamentable panorama no es nuevo; se ha estado manifestando a lo largo de los últimos años. En 2010, la comunidad alcanzó su máxima cifra de natalidad con 20.486 nacimientos, pero esta cifra ha ido declinando paulatinamente: 17.389 en 2015, 13.652 en 2020 y 13.095 en 2021. Tras un leve repunte en 2022 con 13.135 nacimientos, ahora se presencia de nuevo un descenso significativo, con 639 nacimientos menos en el último año.

Los datos han sido revelados en el reciente informe sobre el Movimiento Natural de la Población y los Indicadores Demográficos de 2023, publicado por el Instituto Nacional de Estadística (INE) este miércoles. En este mismo informe, se evidencia que las defunciones en Castilla y León han experimentado una disminución del 9,4 por ciento, quedando en 28.102, en comparación con las 31.017 defunciones registradas en 2022, lo que equivale a 2.915 muertes menos.

Dicha disminución en el número de defunciones constituye el tercer mayor descenso en el ámbito nacional, donde en promedio las muertes cayeron un 6,1 por ciento. Cabe recordar que el año 2020 marcó un pico notable en el número de defunciones, alcanzando la cifra de 36.197, aunque posteriormente descendió a 29.299 en 2021 y repuntó nuevamente en 2022 a 31.017.

Es notable que Castilla y León ha registrado el segundo peor saldo vegetativo del país, marcando una diferencia de -15.606 personas, solo superada en negatividad por Galicia, que ha visto un saldo de -18.778. En contraposición, tres comunidades autónomas, a saber Madrid, Murcia y Baleares, han logrado mantener un saldo positivo, al igual que las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla. A nivel nacional, el saldo vegetativo para España se sitúa en -113.590 personas en 2023.

En lo que respecta a la tasa de fecundidad, Castilla y León presenta un promedio de 1,06 hijos por mujer, posicionándose como el sexto más bajo del país, cuya media se eleva a 1,12. Sin embargo, en un rayo de esperanza, Castilla y León cuenta con la tercera esperanza de vida más alta al nacer, constatándose en un impresionante 84,5 años, frente al 83,8 de media en el conjunto de España.

En el ámbito nacional, los datos corroboran esta tendencia al señalar que en España se han registrado 320.656 nacimientos en 2023, lo que se traduce en 8.595 nacimientos menos que el año anterior. Esta reducción también es un signo alarmante de la prolongada tendencia a la baja que ha caracterizado la última década, con una interrupción puntual en 2014. Desde el año 2013, el número de nacimientos en el país ha decrecido en un notable 24,7 por ciento.