VALLADOLID, 7 Mar.

Agentes de la Policía Nacional de la Comisaría de San Andrés del Rabanedo (León) han procedido a la detención de un individuo que aún no ha alcanzado la edad adulta y a la imputación de otro por la grabación y posterior difusión masiva de un vídeo de carácter sexual de uno con otra menor de 13 años de edad.

Los hechos se remontan a agosto del pasado año, en el momento en que 2 jóvenes sostuvieron relaciones íntimas en un cobertizo descuidado, ignorando la menor de 13 años que eran grabados.

El varón había concertado con un amigo el lugar y sitio a fin de que fuesen grabados en vídeo mientras que efectuaban los actos contados. En un principio la difusión se sostuvo entre el varón actor del comportamiento sexual, el "cámara" que lo recogió en vídeo a través de móvil y un achicado conjunto de amigos.

No fue hasta Navidad en el momento en que se causó una explosión de reenvíos del mismo, llegando a oídos de la menor implicada, que paralelamente lo puso en conocimiento de sus progenitores, los que la acompañaron a dependencias policiales de la comisaría Local de San Andrés del Rabanedo donde se formalizó la pertinente demanda.

A raíz de la demanda de los progenitores de la menor, tras tener conocimiento de la difusión masiva en comunidades de un vídeo de carácter sexual en el que se encontraba implicada su hija, se activó por la parte de la comisaría de la ciudad un operativo para revisar los hechos.

Una vez verificada la identidad de todos y cada uno de los implicados, se procedió a la detención y puesta predisposición de la Fiscalía de Menores del menor que efectuó la grabación, tal como la imputación de un presunto delito de agresión sexual al interviniente en el comportamiento sexual.

Asimismo, se tomó declaración a los menores que hicieron siguientes reenvíos al efecto de saber su presunta participación en algún ilícito penal.

Desde la Policía Nacional se ten en cuenta que el permiso sexual concedido por menor de 16 años es inválido desde la última reforma del Código Penal, que además de esto logró ocultar el abuso, quedando todas y cada una estas formas de proceder tratadas como agresión sexual.

También se ten en cuenta que la difusión de imágenes o vídeos tanto propios como extraños, de carácter íntimo, sin el permiso de otros puede penarse como un delito de revelación de misterios, agravado en las situaciones de perjudicar a menores de edad.