VALLADOLID, 3 Mar.
La economía de Castilla y León medró un 3,4 por ciento en el año 2022, una décima mucho más de lo pensado por el Gobierno autonómico, y ocho décimas en términos reales sobre el Producto Interior Bruto de la Comunidad Autónoma del año 2019, antes de la pandemia.
No obstante y según ha reconocido el asesor de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, en la presentación de los datos de la Contabilidad Regional que corresponden por año 2022, el desarrollo de la economía de Castilla y León fué "algo inferior" al de 2021, en el momento en que el PIB aumentó un 5,0 por ciento.
Fernández Carriedo ha insistido en que el desarrollo económico registrado en 2022 deja sobrepasar los escenarios del PIB prepandemia y ha encriptado en un 111 por ciento la restauración de todo lo perdido desde 2020, en oposición al 88 por ciento en España.
"2022 termina con mayor PIB que en 2019 en términos reales", ha reiterado el asesor que ha recordado que la economía de Castilla y León cayó un 7,2 por ciento en el año de la eclosión del coronavirus, más allá de que logró recobrar una parte de lo perdido en 2021, con ese repunte del 5,0 por ciento, al que siguió el 3,4 por ciento de 2022. La previsión para 2023 es que la economía de Castilla y León prosiga medrando, si bien a menor ritmo (la previsión de la Junta es del 1,6 por ciento).
((((va a haber ampliación))))