MADRID, 27 Ene.
La fiscal de la Audiencia Nacional, Ana Noé, ha entusiasmado este viernes prisión provisional comunicada y sin fianza para el jubilado de Miranda de Ebro presunto creador del envío de cartas fulminantes. Así lo afirman fuentes fiscales, que señalan que P.G.P., de nacionalidad de españa y 74 años de edad, se ha acogido a su derecho a no declarar frente al magistrado.
El Ministerio Público le asigna seis delitos de terrorismo --uno por cada carta incendiaria mandada--, 2 de ellos agravados por ir dirigidas a integrantes del Gobierno. Esos delitos irían en certamen con un delito fabricación, empleo de artefactos explosivos, incendiables, incendiarios con finalidad terrorista.
Desde la Fiscalía motivan su solicitud de prisión incondicional por el peligro de fuga, de ocultación de fuentes de prueba y peligro de comisión de otros hechos delictivos.
El jubilado remitió hasta seis cartas a fines del ya transcurrido mes de noviembre y principios de diciembre a instituciones como Presidencia del Gobierno, Ministerio de Defensa o las embajadas de EEUU y Ucrania en España. Se trata de un individuo muy activa en comunidades y con entendimientos profesionales y también informáticos, según detallaron fuentes del Ministerio del Interior y de la Policía Nacional. El Ayuntamiento de Vitoria ha podido confirmar que fue funcionario de este consistorio hasta 2013.
El detenido, que fue funcionario del consistorio de Vitoria hasta 2013, radicaba en una pequeña vivienda en la calle del Clavel de Miranda de Ebro, donde expertos de la Policía Nacional realizaron este miércoles un registro.
El Ministerio del Interior resaltó que la investigación fué muy "complicada y afanosa", afectando a múltiples provincias de España. Las diligencias pudieron saber que todos y cada uno de los envíos de las seis cartas se hicieron desde la localidad de Burgos.
El pasado 24 de noviembre fue descubierta una carta con material explosivo dirigido al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que había sido remitido por correo postal ordinario. Los servicios del Departamento de Seguridad de Presidencia del Gobierno advirtieron la carta en las tareas de cribado y filtrado de la correo.
Otras cinco cartas afines, por sus especificaciones y contenido, llegaron a la Embajada de Ucrania y a la Embajada de Estados Unidos en Madrid, a la compañía Instalaza en Zaragoza, al Centro de Satélites de la Unión Europea situado en la Base Aérea de Torrejón y al Ministerio de Defensa. Un vigilante de seguridad de la Embajada de Ucrania resultó herido por la explosión de entre los artefactos.
El pasado 3 de enero el juez de la Audiencia Nacional que inspecciona el envío de esta serie de cartas fulminantes acordó abrir una exclusiva línea de investigación en la causa para hacer una secuencia de pesquisas de carácter tecnológico.