Crónica Castilla y León.

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Nuevo brote de gripe aviar en granja de gallinas en Olmedo, Valladolid.

Nuevo brote de gripe aviar en granja de gallinas en Olmedo, Valladolid.

VALLADOLID, 6 de octubre.

En una inquietante actualización, las autoridades veterinarias de la Junta de Castilla y León han revelado un nuevo brote de Influenza Aviar de Alta Patogenicidad (IAAP), específicamente del subtipo H5N1, en una granja de gallinas ponedoras ubicada en Olmedo, Valladolid. Este nuevo caso se suma al foco anteriormente confirmado el 19 de septiembre, situado a solo cinco kilómetros de distancia.

El Laboratorio Central de Veterinaria de Algete, encargado de las pruebas a nivel nacional, ha registrado un total de diez focos de IAAP en aves de corral durante el año 2025. Estos brotes se han detectado en varias provincias como Badajoz, Toledo, Huelva, Guadalajara, Valladolid y Madrid, lo que pone de relieve la propagación del virus en el país.

Desde el 1 de julio, las alarmas se han encendido con la detección de 40 focos adicionales en aves silvestres en diversas comunidades autónomas, incluyendo Andalucía, Extremadura y Galicia, así como en aves cautivas en el País Vasco y Andalucía. Este contexto sanitario plantea serias preocupaciones sobre la salud aviar y la seguridad alimentaria.

La alerta sobre el nuevo foco surgió el 2 de octubre, tras el reporte de un aumento en la mortalidad de las aves a los Servicios Veterinarios Oficiales. En respuesta, las autoridades visitaron la granja, que ya estaba bajo restricciones debido a su ubicación en la zona de vigilancia, con un censo aproximado de 727,000 gallinas.

Una vez realizada la investigación epidemiológica correspondiente y efectuadas las muestras enviadas al Laboratorio Central, se obtuvo la confirmación del virus IAAP subtipo H5N1, lo que llevó a activar protocolos de emergencia.

En respuesta a esta situación, las consejerías de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Sanidad y Medio Ambiente están trabajando de manera coordinada para frenar la propagación del virus. Esto incluye el sacrificio de las aves afectadas y la puesta en marcha de medidas estrictas de control, como la inmovilización de la granja afectada y de otra con la que tiene vínculos epidemiológicos.

Además, se ha establecido una zona de protección de tres kilómetros y una zona de vigilancia de diez kilómetros alrededor del foco. Es crucial mantener un marco de bioseguridad robusto en las explotaciones avícolas para reducir el riesgo de contacto con aves silvestres y activar la vigilancia continua en estos espacios.

A pesar de las preocupaciones generadas, las autoridades han esclarecido que este virus no representa un peligro para el ser humano a través del consumo de carne de ave cocinada o huevos, aunque se aconseja no acercarse a aves que presenten síntomas clínicos o hayan fallecido en el campo, en un esfuerzo por prevenir cualquier posible repercusión de la enfermedad.