Los inminentes trabajos de demolición del edificio ubicado en el número 1 de la Plaza de San Nicolás, cuyo presupuesto se sitúa en unos 300.000 euros, serán finalmente repercutidos a la propiedad del inmueble, debido a la inacción de esta última ante una situación que se ha vuelto insostenible.

VALLADOLID, 13 Ene.

El Ayuntamiento de Valladolid ha decidido actuar de manera subsidiaria este martes, tras el desplome de la pared medianera que ha dejado en evidencia el estado crítico de un edificio que lleva años en ruinas. Esta intervención es urgente dado que el inmueble había sido desatendido por sus propietarios durante un tiempo considerable.

Ignacio Zarandona, concejal de Urbanismo y Vivienda, calificó el suceso de este lunes como un grave problema, en una comparecencia ante los medios acompañado por el edil de Salud Pública y Seguridad Ciudadana, Alberto Toquero. La Policía Municipal ha mantenido un cordón de seguridad en la zona durante toda la noche para prevenir cualquier riesgo adicional a la comunidad. Esta situación ha llevado a los responsables municipales a poner en marcha de inmediato los trabajos de demolición, que ya habían sido planificados desde el pasado mes de agosto.

La decisión de demoler el edificio no solo representa una inversión significativa, sino que también abre un capítulo más en una historia que se remonta a 2005. Desde entonces, los propietarios del inmueble no se han hecho responsables de las reparaciones necesarias, a pesar de la declaración de ruina económica que emitió el Consistorio vallisoletano.

"Es un asunto que lleva demasiado tiempo sin resolución y lo realmente crucial ahora es actuar con celeridad para garantizar la seguridad de los ciudadanos", subrayó Zarandona, quien prefirió no entrar en detalles sobre la relación conflictiva entre el Consistorio y los propietarios, que actualmente administran otros inmuebles en la ciudad.

Zarandona también precisó que ya existía una orden de demolición pendiente sobre el edificio, a la que ahora el Ayuntamiento estará obligado a dar cumplimiento de forma urgente. Los trabajos comenzarán este martes a partir de las 08:00 horas, en consideración al riesgo de una posible "caída" total de la estructura.

El concejal advirtió que los trabajos de demolición serán altamente técnicos y cuidadosos, llevándose a cabo con la ayuda de una empresa especializada. Se utilizará una grúa de gran tonelaje, y los operarios trabajarán desde una cesta, lo que ayudará a mitigar los riesgos para la salud y seguridad de los trabajadores durante la operación, requiriendo así que la plaza permanezca cerrada al público.

A pesar de que se consideró la opción de "arriostrar" o conservar la fachada del edificio, al contar con una protección de nivel 'P 4', finalmente se optó por el derribo total debido al deterioro avanzado que presenta la construcción.

Alberto Toquero, concejal de Salud Pública y Seguridad Ciudadana, también destacó las acciones de seguridad implementadas por la Policía Municipal, que incluyeron relevos de agentes a lo largo de la noche y la retirada de varios vehículos de un garaje cercano, todo con el fin de garantizar la seguridad en el área, aumentando la protección para los niños que asisten a un colegio situado en la vecindad del edificio en cuestión.