VALLADOLID, 7 de noviembre.
En un análisis contundente sobre la situación política actual en Castilla y León, el portavoz del Grupo Parlamentario de Vox y exvicepresidente de la Junta, Juan García-Gallardo, ha expresado este jueves su opinión rotunda acerca de la reciente aprobación del Techo de Gasto para 2025. A su juicio, esta decisión ha resultado ser un error estratégico para el presidente del Gobierno autonómico, Alfonso Fernández Mañueco, quien se halla en una complicada encrucijada ante la presión creciente de la oposición.
García-Gallardo realizó estas afirmaciones durante su visita a la sede de la Asociación de Vecinos del Barrio Delicias, donde conversó con los medios después de que el Pleno de las Cortes aprobara el Techo de Gasto. Esta medida fue posible gracias a la abstención del Grupo Parlamentario Socialista, lo que ha abierto un nuevo debate sobre la estabilidad y la dirección política que tomará la Junta en los próximos meses.
“A Mañueco le ha salido mal la jugada”, sentenció García-Gallardo, quien subrayó que el presidente de la Junta nunca tuvo verdaderas intenciones de aprobar los presupuestos para 2025. Al respecto, mencionó comentarios que habría hecho Fernández Mañueco en privado a ciertos periodistas, insinuando que su estrategia parecía más orientada a evadir la responsabilidad que a buscar un consenso auténtico.
El representante de Vox agregó que el presidente ya había contemplado la opción de prorrogar los presupuestos existentes, acusándolo de intentar presentar un anteproyecto únicamente para legitimar su actuación ante la opinión pública, mientras que en realidad carece de un compromiso sólido para presentar un nuevo presupuesto. “No ha tenido ninguna voluntad real de negociar”, afirmó con rotundidad.
En esta línea, García-Gallardo dejó claro que Vox mantendrá su posición de rechazo ante cualquier esfuerzo por parte del Gobierno para aprobar los presupuestos. “No vamos a apoyar la deriva del señor Mañueco”, recalcó, enfatizando la firmeza de su postura en un contexto donde las decisiones financieras son cruciales para el futuro de la comunidad.
Asimismo, recordó las condiciones que Vox había señalado como “premisas” innegociables para tratar de llegar a un acuerdo con el Partido Popular en torno a cualquier presupuesto. En particular, mencionó la necesidad de preservar las políticas previamente implementadas por Vox en el Gobierno de la Junta, así como abordar de forma efectiva el fenómeno de la inmigración masiva, una cuestión que el presidente ha evadido asegurando que no tomará medidas y que continuará acogiendo de manera indiscriminada a menores extranjeros no acompañados.
En resumen, el portavoz de Vox en las Cortes sugirió que la solución más sensata ante la actual coyuntura sería prorrogar el presupuesto de 2024 para el año 2025. Según él, esta decisión evitaría generar “distorsiones innecesarias” para los ciudadanos de la comunidad.
“Proponemos que se prorrogue ese presupuesto y que se gestione de esta manera hasta el final de la legislatura. Posteriormente, después de las elecciones y con la nueva mayoría que se logre conformar, habrá que reevaluar y negociar”, concluyó García-Gallardo, dejando clara su visión pragmática sobre la delicada situación financiera que enfrenta Castilla y León.
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