El incendio en Barniedo de la Reina ha llevado a la evacuación de la localidad de Llánaves, sumando un nuevo desafío para las autoridades en su lucha contra el fuego.

En León, el 16 de agosto, Enrique Rey, director técnico del operativo de extinción de incendios en Yeres y Llamas de Cabrera, ha informado sobre la situación de estos focos de fuego, que, aunque geográficamente separados, amenazan a varias comunidades cercanas. El objetivo principal del dispositivo es salvaguardar a la población, en particular a las pedanías de Ponferrada, que se encuentran en la trayectoria del fuego.

La jornada del pasado viernes se caracterizó por su complejidad, ya que los incendios de Yeres y Llamas, aún distanciados por el Valle de Santalavilla, presentan un estado de control apenas del 80 a 90 por ciento de su perímetro. En el norte, las condiciones son aún más adversas, especialmente en la zona montañosa. En la cabeza de la Yegua, a una altitud de 2.000 metros, se observa un frente que se extiende a lo largo de un par de kilómetros, lo que complica aún más las labores de extinción.

El clima de la última jornada ha sido calificado como "muy desfavorable", con vientos cambiantes, altas temperaturas y sequedad, lo que complicó aún más la situación. Rey ha advertido que, al caer la noche, las condiciones parecen empeorar debido al "calor acumulado", lo que ha generado comportamientos del fuego que califica como "totalmente anómalos". En este sentido, mencionó la formación de pirucúmulos, nubes gigantes creadas por el intenso calor y el humo de los grandes incendios, que suelen aparecer en las horas centrales del día pero que, en este caso, se manifiestan en la noche.

Este comportamiento inusual impide que el equipo operativo pueda replantear sus tácticas de combate. No obstante, su enfoque sigue siendo la protección de las comunidades en riesgo, concentrando sus esfuerzos en la estrategia del sábado 16, cuando el fuego se encuentra en sus etapas iniciales en Llamas, avanzando hacia Ponferrada.

A consecuencia de este incendio, más de 300 residentes de Espinoso de Compludo, San Cristóbal de Valdueza y Manzanedo de Valdueza fueron evacuados en la madrugada, mientras que en la mañana del sábado se sumaron los habitantes de Palacios del Compludo, Carracedo de Compludo y Compludo, todos bajo la jurisdicción de Ponferrada.

Asimismo, el incendio en Barniedo de la Reina, que presenta un Índice de Gravedad Potencial (IGR) 2, también ha llevado a la evacuación de Llánaves de la Reina, donde residen personas que ahora se ven obligadas a abandonar sus hogares, siguiendo el ejemplo de la ya evacuada Portilla.

Por último, se han registrado cortes en varias carreteras de la provincia a raíz de los incendios, lo que añade más complicaciones a la situación ya de por sí crítica.