VALLADOLID, 23 de agosto. La Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural de Castilla y León ha tomado medidas decisivas ante la crisis provocada por los recientes incendios. En tan solo una semana, han distribuido más de 922.000 kilogramos de paja, forraje y pienso, beneficiando a 74 explotaciones ganaderas afectadas, principalmente en las provincias de León y Zamora, donde se registran 38 y 29 ganaderías perjudicadas, respectivamente.

Desde el 14 de agosto y hasta el 30 de septiembre, esta iniciativa está en marcha. Hasta el momento, se han movilizado 55 camiones con alimentos hacia las áreas más impactadas, atendiendo a más de 10.800 animales hasta el pasado viernes, según un comunicado oficial de la Junta que ha sido difundido por Europa Press.

Además, la Consejería ha señalado que se encuentran en proceso de garantizar que la asistencia llegue en los próximos días a más ganaderos. Se están aplicando criterios de prioridad para la distribución, basándose en las necesidades que han señalado los propios afectados, lo que asegura que la ayuda se dirija a quienes más la requieren.

El objetivo del gobierno regional es que esta provisión de “emergencia” llegue a todos los ganaderos que lo necesiten. Por ello, han hecho un llamado a que las solicitudes se gestionen a través de los servicios territoriales, con el propósito de coordinar y agilizar el proceso de entrega.

En un encuentro reciente, celebrado el 22 de agosto entre los responsables de la Consejería y las Organizaciones Profesionales Agrarias, se tomó la decisión de extender este servicio de provisión de alimentos hasta finales de septiembre. A partir de esa fecha, se implementará una ayuda económica directa por hectárea de pasto dañado, la cual se ajustará según la carga ganadera de cada explotación, asegurando así un soporte adaptado a la medida de cada productor afectado.