Crónica Castilla y León.

Crónica Castilla y León.

Solo el 9,3% de los habitantes de Castilla y León trabaja desde casa de manera habitual.

Solo el 9,3% de los habitantes de Castilla y León trabaja desde casa de manera habitual.

VALLADOLID, 19 de marzo. En Castilla y León, el teletrabajo continúa siendo una práctica viable para una parte significativa de la población. Según datos recientes del Instituto Nacional de Estadística (INE) de finales de 2024, un 9,3% de los castellanoleoneses trabaja desde casa de manera habitual.

De este porcentaje, el 5,6% de los teletrabajadores realiza esta actividad con frecuencia, dedicando más de la mitad de su jornada laboral a esta modalidad, mientras que el 4,6% lo hace de manera ocasional, es decir, menos del 50% de su tiempo. Sin embargo, Castilla y León se sitúa en una posición media-baja en comparación con otras regiones de España, donde el promedio nacional de teletrabajadores asciende al 14,6%.

Entre las comunidades que destacan en el uso del teletrabajo, Madrid se posiciona como la líder indiscutible, con el 25,9% de sus trabajadores adoptando esta modalidad. Le siguen Cataluña, con un 16,2%, la Comunidad Valenciana con un 14,4%, el País Vasco con un 13,1% y Galicia con un 12,4%.

Por otro lado, las regiones con menor proporción de teletrabajadores incluyen La Rioja, con un escaso 6,3%, Canarias (8,2%), Navarra (9%), Castilla y León (9,3%) y la Región de Murcia (9,4%).

A nivel nacional, alrededor del 15% de los empleados en España implementa el teletrabajo de manera habitual para cumplir con sus responsabilidades laborales. En concreto, el 14,6% de los profesionales ha optado por esta modalidad, marcando un aumento significativo en comparación con los últimos tres años, solo superando la cifra durante los períodos de confinamiento impuestos por la pandemia.

A pesar de que el teletrabajo ha disminuido desde los niveles máximos alcanzados durante los confinamientos por Covid-19, las tendencias nacionales han mostrado un incremento en los últimos años, aunque ciertas comunidades, como Castilla y León, aún no logran experimentar este crecimiento.

“Los modelos híbridos de trabajo están arraigándose tanto en España como en otros países desarrollados debido a la demanda de los trabajadores por una mejor conciliación entre su vida profesional y personal”, asegura Oriol Mas, director general de Randstad Enterprise.

Antes de la pandemia, el teletrabajo era prácticamente inexistente en el entorno laboral español, con menos del 5% de los trabajadores en 2019 realizando su trabajo desde casa más de la mitad de la semana. Sin embargo, la llegada de la pandemia llevó a un aumento súbito de estas cifras, y aunque han retrocedido desde sus picos, la tendencia de adopción sigue en marcha.

El último Informe Workmonitor de Randstad, que evalúa las tendencias laborales en 35 países a través de más de 26.000 encuestas, sugiere que las prioridades de los trabajadores están cambiando. En este contexto, el 53% de los empleados estarían dispuestos a dejar su puesto si interfiriese en su vida personal, mientras que un 39,2% haría lo mismo si no se atendieran sus solicitudes de flexibilidad. En España, el 39% de los trabajadores no dudaría en aceptar una reducción de ingresos a cambio de una mejor conciliación con su vida personal.