VALLADOLID, 9 de septiembre.

La Confederación de Federaciones de AMPAs de Castilla y León, conocida como Confapacal, ha calificado el nuevo servicio de monitores implementado por la Consejería de Educación como una mera "pantalla" y una "parodia" en la atención a los alumnos durante los meses de septiembre y junio, cuando el horario escolar se reduce.

María Soledad Alegre, presidenta de esta organización, expresó su profunda preocupación por la falta de información que ha caracterizado este proceso desde que se anunció la medida en mayo. Según Alegre, la Consejería no ha mantenido contacto efectivo con los centros educativos para coordinar este servicio. "A finales de agosto, nuestra comunicación con la Consejería dejó claro que solo nos dijeron que la empresa encargada ya estaba contratada y que todo funcionaría sin inconvenientes. Sin embargo, los instructivos supuestamente remitidos a los centros no han llegado, según afirman los equipos directivos", declaró.

Este desajuste ha generado un clima de incertidumbre, ya que las direcciones de varias instituciones han contradicho la versión oficial y han reportado que el pasado viernes recibieron mensajes "confusos" indicando que el servicio no estaría disponible. Asimismo, se había solicitado a los docentes que asumieran las horas vacantes, lo que ha contribuido aún más a la preocupación generalizada.

Alegre enfatizó que esta situación es inaceptable, afirmando que "se presenta como una mera representación de intenciones", y que lo que realmente está sucediendo es que la Consejería intentará justificar la falta de servicio argumentando que no hubo demanda por parte de las familias. "La verdad es que las familias no han podido solicitar este servicio porque no se les ha informado adecuadamente", concluyó de manera contundente.