En la mañana del pasado jueves, el panorama político en Santibáñez de la Sierra, un pequeño municipio de la provincia de Salamanca, dio un giro significativo con la asunción del PSOE a la Alcaldía, luego de que se aprobara una moción de censura contra la alcaldesa del PP, Elena Nieto. Esta decisión fue impulsada por la percepción de una gestión pública considerada, por muchos, como “desastrosa y caótica”.

Ángel Fernando Castaño, el nuevo alcalde, llega al cargo tras la votación en el pleno del Ayuntamiento, donde el apoyo se distribuyó en tres votos a favor del PSOE y dos del PP. La sorpresa se presentó cuando el concejal Rodríguez Santos decidió respaldar la propuesta socialista, un giro que ha reconfigurado el mapa político local. La exalcaldesa Nieto y su compañera de partido, Ana Isabel Martín Blanco, se manifestaron en contra, pero su esfuerzo fue insuficiente para mantener el control.

A pesar de que en las elecciones municipales de 2023 el PP contaba con dos concejales frente a los tres del PSOE, la elección de Rodríguez Santos a favor de la coalición del PP había dado inicialmente la alcaldía al partido conservador. No obstante, los cambios en la dinámica política han cambiado de forma abrupta este escenario.

Los concejales socialistas han expresado su preocupación sobre el estado actual del municipio, señalando que la gestión de la alcaldesa saliente dejaba a los habitantes de Santibáñez y de la cercana Santa María de los Llanos en una situación crítica, carentes de servicios básicos adecuados. Las quejas sobre la ineficacia en la prestación de servicios por parte de la administración del PP han sido comunes entre los vecinos.

Desde la formación socialista, se defendió la moción de censura argumentando que las inversiones efectuadas durante la legislatura provenían en su mayoría de proyectos anteriores, dejando entrever que la actual gestión había hecho poco para mejorar la situación económica y social del municipio.

El Grupo Municipal del PSOE concluyó que los antecedentes de la alcaldía saliente habían alimentado una desconfianza creciente entre los ciudadanos, llevando a lo que consideran un deterioro del gobierno municipal y su imagen pública. Este cambio de liderazgo podría marcar el inicio de una nueva etapa en la política local de Santibáñez de la Sierra.