En la madrugada del pasado sábado en Valladolid, la Policía Nacional llevó a cabo la detención de una mujer bajo la sospecha de haber agredido a un agente de la autoridad, quien requirió atención médica por lesiones en los brazos en el Hospital Universitario Río Hortega.

Una patrulla de la Policía Nacional, que no iba identificada y realizaba labores preventivas, detectó una acalorada disputa entre dos jóvenes en las proximidades de la plaza de San Miguel, lo que les llevó a intervenir.

Al acercarse a las mujeres para indagar sobre el origen del altercado, los agentes, que se encontraban de paisano, se identificaron como policías. Sin embargo, una de las jóvenes reaccionó de forma desafiante, manteniendo una actitud agresiva, por lo que se le advirtió que su comportamiento constituía una infracción de la Ley Orgánica de Protección de la Seguridad Ciudadana.

En respuesta a la situación, se solicitó el apoyo de una unidad uniformada, que encontró la misma resistencia verbal y amenazas por parte de las involucradas, intensificando la tensión en el lugar.

En un momento crítico, una de las mujeres se lanzó hacia un agente con la intención de agredirlo, lo que desencadenó un forcejeo que resultó en lesiones para el policía, quien tuvo que ser atendido en el hospital tras el incidente.

A pesar de la resistencia de la detenida, los agentes lograron arrestarla, aunque fue un proceso complicado debido a su comportamiento alterado y agresivo, lo que le valió la acusación de atentado contra un agente de la autoridad.

Posteriormente, la mujer fue llevada a un centro médico para su evaluación y, más tarde, trasladada a la comisaría para iniciar los trámites correspondientes a su infracción. Finalmente, tras completar los procedimientos necesarios, fue puesta a disposición de la Autoridad Judicial, quien decidió su liberación.