PALENCIA, 4 de julio. En un reciente suceso que pone de manifiesto la preocupación por la seguridad vial en nuestras carreteras, la Guardia Civil ha tomado medidas contra un joven conductor de 24 años, de nacionalidad española, que fue interceptado por exceder notablemente la velocidad permitida en la N-610, a la altura de Baquerín de Campos.

Los hechos ocurrieron la mañana del pasado viernes durante un control de velocidad llevado a cabo por el Subsector de Tráfico de Palencia. En este operativo, un radar detectó a una furgoneta que circulaba a la asombrosa velocidad de 195 kilómetros por hora, muy por encima del límite de 80 km/h establecido para la vía en cuestión.

Ante esta infracción, las autoridades notificaron al infractor que había cometido un delito contra la seguridad vial al viajar 115 km/h más rápido de lo permitido. Este incumplimiento de las normativas de tráfico en una carretera interurbana representa un grave riesgo no solo para el propio conductor, sino también para el resto de usuarios de la vía.

Según ha indicado la Subdelegación del Gobierno, los procedimientos legales ya están en marcha, y el conductor deberá presentarse en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Palencia, donde se están recopilando todos los informes necesarios para la investigación.

Las consecuencias para el infractor pueden ser severas. Se le advierte que este tipo de conductas delictivas pueden acarrear penas de prisión que oscilan entre tres y seis meses. Alternativamente, puede enfrentarse a multas que varían de seis a doce meses, o incluso realizar trabajos en beneficio de la comunidad durante un período de 31 a 90 días. Adicionalmente, la ley contempla la privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por un periodo de uno a cuatro años, un aspecto crucial para la promoción de una conducción responsable.