La Junta de Castilla y León ha anunciado recientemente una importante iniciativa para el sector agrícola, al publicar en el Boletín Oficial de la región una convocatoria de ayudas que suman un total de 100 millones de euros. Estos fondos están destinados a modernizar las explotaciones agrarias y facilitar la incorporación de jóvenes agricultores, con un plazo para presentar solicitudes que se abre este viernes y se extiende hasta el 31 de octubre de 2025, exclusivamente de manera telemática.
Este esfuerzo fue revelado por el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, quien subrayó que las ayudas representan un pilar fundamental en la estrategia del Ejecutivo para promover la profesionalización y la competitividad del sector agrario. Según fuentes del gobierno regional consultadas por Europa Press, estas medidas están orientadas a hacer el sector más sostenible y eficiente.
La convocatoria, que se inscribe dentro del Plan Estratégico de la PAC para el período 2023-2027, cuenta con el respaldo del Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (Feader), así como de la Administración General del Estado y la propia Comunidad de Castilla y León. Esta colaboración es crucial para maximizar el impacto de las inversiones en el campo.
Específicamente, el programa contempla tres áreas de intervención: la priorización en el establecimiento de jóvenes agricultores, inversiones en la producción que garanticen la sostenibilidad y el bienestar animal, y por último, ayudas dirigidas a modernizar las explotaciones agrícolas. Esta estructura busca atender las principales necesidades del sector.
Los jóvenes interesados tendrán la posibilidad de solicitar ayudas tanto para su incorporación al sector como para la modernización de sus explotaciones, lo cual puede proporcionar un impulso significativo a sus proyectos desde el inicio. No obstante, deberán cumplir con ciertos requisitos y superar una puntuación mínima de ocho puntos para acceder a los fondos.
Es importante señalar que la convocatoria abre la puerta a jóvenes que se integren a explotaciones bajo diferentes modalidades, como titularidades compartidas o entidades asociativas, siempre que puedan demostrar su papel activo en la gestión y el capital de la explotación.
Una de las características más destacadas de esta convocatoria es su simplificación. Esto se ha logrado gracias a los trabajos de tres grupos de trabajo compuestos por representantes de organizaciones agrarias y técnicos del gobierno, lo que ha permitido mejorar tanto la normativa como la aplicación de las ayudas, al tiempo que se reduce la burocracia y se agilizan los plazos de resolución.
Además, la Junta ha atendido una demanda histórica de las organizaciones profesionales del sector, aumentando el número y el valor de los costes de referencia. Este proceso ha contado con la colaboración de colegios de ingenieros agrónomos y técnicos agrícolas, cuyo conocimiento aporta una perspectiva objetiva ajena a la Administración.
En términos concretos, se han revisado y aumentado 320 costes de referencia, añadiendo además 66 nuevos elementos, lo que simplifica los procedimientos para los beneficiarios a la hora de solicitar la ayuda y llevar a cabo sus inversiones.
Entre los requisitos establecidos, se destaca la necesidad de que los solicitantes demuestren su capacitación profesional en el ámbito agrario, al menos a través de un certificado que acredite la finalización de un curso de incorporación a la actividad agrícola. También deberán presentar un plan técnico adaptado a la ayuda que solicitan.
Los jóvenes agricultores, por su parte, tendrán que detallar aspectos fundamentales como su modelo productivo, la viabilidad económica, la proyección de empleo y la estrategia de desarrollo para sus explotaciones. Para las ayudas de modernización, será necesario especificar los elementos técnicos y las inversiones previstas, además de considerar el impacto ambiental y la mejora de la eficiencia operativa.
Históricamente, el importe medio de estas ayudas a jóvenes agricultores ha superado los 64.000 euros, y pueden aumentar según la localización geográfica del solicitante, su condición de socio de entidades prioritarias del sector agroalimentario, o si su instalación se lleva a cabo en una explotación de un titular que se jubila, lo que puede sumar hasta 15.000 euros adicionales.
Las ayudas para la modernización de explotaciones abarcan medidas como la compra de maquinaria, la mejora de instalaciones, la digitalización, la eficiencia energética, el riego, el bienestar animal, la adaptación al cambio climático y las condiciones laborales.
Asimismo, se dará preferencia a las explotaciones dedicadas a la producción de leche de ovino y caprino, en el marco de un nuevo plan de apoyo específico que la Junta implementará para fortalecer este sector estratégico.
Las solicitudes deberán ser presentadas a través de la plataforma digital habilitada en la sede electrónica de la Junta de Castilla y León, disponible en www.tramitacastillayleon.jcyl.es.
Tags:
Categoría:
Newsletter
Entérate de las últimas noticias cómodamente desde tu mail.