Un grupo criminal que operaba en Valladolid ha sido desmantelado por la Guardia Civil tras realizar diversas actividades delictivas, incluyendo asaltos a vehículos y viviendas. Los delincuentes se hacían pasar por agentes de la ley, utilizando coches sustraídos con matrículas alteradas y luces de emergencia para llevar a cabo sus fechorías.

Con fecha de 2 de octubre, se destaca que la operación, conocida como 'Rulpa', culminó con la detención de tres individuos tras un robo en una residencia de Laguna de Duero, donde lograron llevarse un vehículo de lujo.

Los arrestados, personas de alta peligrosidad y ya conocidas por las autoridades, enfrentan cargos por múltiples delitos, entre ellos robo con fuerza, robo violento, falsificación de documentos, y usurpación de funciones, según declaraciones de fuentes del Instituto Armado a Europa Press.

La investigación se inició a principios de enero tras el robo en Laguna de Duero, donde los delincuentes aprovecharon la ausencia de los propietarios para llevarse joyas, efectivo y las llaves de un Porsche, el cual fue sustraído del garaje al instante.

Se descubrió que para perpetrar este atraco, los criminales utilizaron vehículos previamente robados en Arroyo de la Encomienda y Móstoles, en la Comunidad de Madrid.

El 7 de abril, los mismos autores usaron el coche robado en Laguna de Duero, ahora con una matrícula falsa, para intentar realizar un nuevo asalto en Tarancón (Cuenca), donde elevaron la violencia durante el ataque, aunque finalmente no lograron consumar el robo gracias a la rápida respuesta de la Guardia Civil, alertada por testigos de la autovía A-3.

A pesar del fallo en esa ocasión, su actividad delictiva prosiguió el 22 de abril en Geria, Valladolid, donde volvieron a implementar el modus operandi conocido como “policías full”. Esta vez, lograron interceptar un vehículo en un área de servicio y, bajo la apariencia de una operación policial, robaron nuevamente un Porsche.

Uno de los detenidos fue ubicado el 23 de septiembre en Cubillas de Santa Marta, Valladolid. Al verse atrapado, trató de esconderse en una propiedad familiar y evadirse, pero tras la intervención de un negociador de la Guardia Civil, finalmente se entregó. Durante esta operación también fue arrestada su pareja por desobediencia a las autoridades.

La banda también es responsable de un delito ambiental ocurrido el 15 de mayo, cuando abandonaron y quemaron un vehículo robado en el Pinar de Antequera, lo cual representó un grave riesgo para el entorno y la población cercana.

Tras realizar varios registros en diferentes domicilios, las autoridades intervinieron dispositivos electrónicos, documentación relevante, 1.000 euros en efectivo, perfumes, cámaras de seguridad, relojes, munición y inhibidores de frecuencia, además de cuatro vehículos robados.

La Guardia Civil ha presentado las acusaciones correspondientes ante un juzgado de Valladolid, y aunque la operación sigue abierta, uno de los detenidos ya ha sido enviado a prisión por decisión judicial.