LEÓN, 28 de agosto.

En un reciente incidente que ha llamado la atención en la provincia de León, el Equipo de Protección de la Naturaleza (Eprona) de la Guardia Civil ha iniciado una investigación penal contra un hombre de 73 años. Esta acción se debe a su presunta responsabilidad en un incendio forestal causado por una imprudencia grave, ocurrido en la tarde del miércoles 27 de agosto, cerca de la localidad de San Justo de la Vega.

Las indagaciones realizadas por los agentes de la Guardia Civil, en colaboración con los especialistas medioambientales de la Junta de Castilla y León, han revelado que el fuego se originó a partir de varias colillas de cigarrillos que no fueron correctamente apagadas, en una zona con abundante vegetación seca, lo que facilitó la ignición.

El incendio se propagó rápidamente por el área circundante, impulsado por fuertes ráfagas de viento, afectando a una variedad de flora, incluyendo encinas y pinos, y arrasando alrededor de dos hectáreas de terreno, según lo indicado por fuentes de la Subdelegación del Gobierno en León a Europa Press.

Los servicios de extinción de incendios de la Junta de Castilla y León actuaron con celeridad y pudieron controlar el fuego en un corto período de tiempo. A su vez, varias patrullas de la Guardia Civil de Astorga permanecieron en el lugar para garantizar la seguridad y gestionar el tráfico durante las labores de extinción.

Las diligencias relacionadas con este caso, así como el individuo investigado, han sido presentados ante el Juzgado de Instrucción de Guardia de Astorga y la Fiscalía de Medio Ambiente de León.

Es importante destacar que el Código Penal contempla sanciones severas para este tipo de delitos, que pueden incluir penas de prisión de uno a cinco años y multas que oscilan entre doce y dieciocho meses.