VALLADOLID, 15 Nov. - El vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Juan García-Gallardo, ha expresado hoy su opinión de que el PSOE no puede ser considerado "un interlocutor válido". Además, reconoce que la situación se complica tras la desestimación de las medidas cautelares solicitadas por Vox para frenar el debate de investidura de Pedro Sánchez. A pesar de esto, el partido continuará adelante con sus planes.
García-Gallardo hizo estas declaraciones a los medios antes de asistir a la inauguración de la Feria del Empleo y del Emprendimiento de León. En este evento, lamentó que no se puedan centrar únicamente en los buenos datos económicos de Castilla y León y la provincia de León, ya que considera que estamos presenciando un ataque sin precedentes a la Unidad de España y al Estado de Derecho.
El vicepresidente de la Junta considera que la investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno es un avance en la agenda separatista, con la colaboración del Partido Socialista, al que ya no reconoce como un interlocutor válido. Además, señala que las asociaciones de jueces en España, tanto conservadoras como afines al Partido Socialista, han criticado los acuerdos en el acuerdo entre el PSOE y los independentistas catalanes.
García-Gallardo menciona también la desestimación de las medidas cautelares solicitadas por Vox, lo que complica aún más la situación. Sin embargo, el partido seguirá adelante, defendiendo el Estado de Derecho y la democracia en todos los niveles.
Critica a los cargos públicos del PSOE en León por condonar la deuda del gobierno separatista catalán mientras ignoran las necesidades de la provincia, como la industria y las reclamaciones de los ciudadanos. Considera "realmente increíble" que el PSOE pueda ignorar lo que está ocurriendo en el país mientras se niegan recursos a la "España abandonada y silenciada". Además, critica el uso de millones de euros para aquellos que se levantaron contra el Estado de Derecho y cometieron graves delitos de corrupción y malversación de fondos públicos.
En relación al estado de las autonomías, García-Gallardo afirma que ha alimentado y favorecido el crecimiento del "monstruo de los separatismos". Vox aspira a reformar el título VIII de la Constitución Española, que trata sobre la organización territorial del Estado. Sin el estado de las autonomías, no se hubiera cedido la competencia de educación a los separatistas ni se hubieran creado las televisiones públicas que han alimentado un relato falso sobre la historia de España. Además, sin el estado de las autonomías, no tendríamos a un señor en Waterloo dictando la política nacional de España.