En una sentencia emitida por la Audiencia de Valladolid, el empresario rumano Alim M.D. ha sido condenado a ocho meses de prisión por emplear en la recogida de patatas a trabajadores extranjeros irregulares. Estos empleados no estaban dados de alta en la Seguridad Social ni contaban con autorización de residencia en España.

El tribunal también impuso a Alim M.D. una multa de 1.920 euros, aunque decidió absolver al coacusado Sheger M.T. de los mismos cargos. El tribunal argumentó que la actividad delictiva duró solo un día o dos, por lo que consideró una pena mínima.

En el juicio, se mencionó que la urgencia de ciertas empresas, como las productoras de snacks, a veces conlleva una cierta improvisación y precipitación en la actividad de recogida de productos. Los acusados fueron sorprendidos en una finca en Muriel de Zapardiel junto con otros trabajadores extranjeros en situación irregular.

Alim M.D. afirmó haber contratado a los trabajadores ese mismo día y haber comenzado el proceso de darlos de alta. Por su parte, Sheger M.T. actuaba como intermediario y apoyo debido a la falta de dominio del idioma español y carencia de carné de conducir.

Agentes de la Guardia Civil y la subinspectora de Trabajo informaron que el trabajo se estaba realizando de forma irregular y que los trabajadores no estaban dados de alta en la Seguridad Social, ni contaban con permiso para trabajar en España. El fiscal del caso sostuvo que ambos acusados se valieron de la necesidad de los trabajadores para emplearlos sin contrato.

Por otro lado, la defensa solicitó la absolución de los acusados y criticó las penas solicitadas, argumentando que los hechos eran de naturaleza administrativa y no penal. El caso fue juzgado el pasado 17 de septiembre en la Audiencia de Valladolid.