VALLADOLID, 14 de julio. La senadora del Partido Popular y hermana del emblemático Miguel Ángel Blanco, Mari Mar Blanco, ha dirigido fuertes críticas hacia el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, acusándolo de otorgar poder a aquellos que aplaudieron los actos terroristas de ETA. Blanco ha subrayado que “ningún gobierno merece ser respaldado” si se concede espacio político a los descendientes de esta organización criminal.

En su emotivo discurso durante un homenaje celebrado en Valladolid en memoria de su hermano, asesinado por ETA hace casi tres décadas, Blanco se cuestionó: “¿Puede una democracia considerarse tal si blanquea el terror? ¿Es posible hablar de avance mientras se le entrega poder a quienes vitorearon los disparos? ¿Se puede mirar a las víctimas a la cara mientras se negocia con sus verdugos?”

La senadora expresó su pesar por el hecho de que el Gobierno considere a EH Bildu un aliado político, a pesar de que este partido no ha condenado el asesinato de Miguel Ángel y continúa rindiendo homenaje a los etarras. También destacó que incluyen en sus listas a personas ya condenadas y no han tomado medidas para esclarecer más de 300 crímenes perpetrados por ETA.

Blanco afirmó que el líder de Bildu, Arnaldo Otegui, posee información crucial que podría ayudar a numerosas familias a descubrir la identidad de los asesinos de sus seres queridos. En este sentido, exigió “justicia” y “memoria” para las víctimas del terrorismo.

Subrayó que la “memoria” no puede ser cuestionada y que no se debe establecer un equilibrio entre las víctimas y los asesinos. Insistió en la necesidad de que las instituciones mantengan su firmeza en la lucha por la justicia y no cedan ante la presión de quienes intentan diluir el pasado.

“Cualquiera que pretenda manipular la historia desde su oficina se equivoca, porque la memoria se edifica sobre la dignidad de quienes perdieron todo, y no a expensas de su recuerdo”, remarcó. De nuevo, criticó al Gobierno por su alianza con Bildu, advirtiendo que esto significa concederles poder y una plataforma política.

Además, enfatizó que, a pesar de haber transcurrido 28 años desde el asesinato de su hermano, sigue siendo común descalificar a quienes defienden la justicia y la dignidad de las víctimas del terrorismo, al tiempo que se otorgan facilidades a los herederos de ETA, que aún no han realizado la transición hacia la plena democracia.

Blanco instó a revivir el “espíritu de Ermua” como símbolo de honor, memoria y verdad, señalando que es fundamental estar unidos contra quienes no condenan la violencia, quienes no piden disculpas, y quienes comparten poder con los herederos del terror y tratan de reescribir la historia.

El homenaje, organizado por Nuevas Generaciones en Valladolid, fue celebrado como un acto de dignidad frente al olvido, resaltando la importancia de mantener viva la memoria de las víctimas en un momento en que otros intentan suprimirla.

Asimismo, agradeció al presidente de la Junta y del PP de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, por su compromiso con la memoria de todas las víctimas del terrorismo, incluido su hermano, cuyo asesinato dejó una huella profunda en la historia de España.

El evento contó con la presencia de Fernández Mañueco, el alcalde de Valladolid, Jesús Julio Carnero, y el presidente de la Diputación, Conrado Íscar, junto a otros destacados miembros del PP de Valladolid y Castilla y León, así como representantes de Nuevas Generaciones.