En un suceso reciente en Salamanca, ocho hombres, cuyas edades oscilan entre 25 y 46 años y que son de origen extranjero, han sido arrestados bajo sospecha de robar una considerable cantidad de cable de cobre. Según informes de la Guardia Civil, la cantidad sustraída asciende a 2.000 kilos y el daño causado es significativo.

Los eventos se desarrollaron en la madrugada del 20 de junio en Lumbrales, donde los agentes sorprendieron a un grupo de varones dormidos en las cercanías de una furgoneta de gran tamaño, camuflada en una zona boscosa. Este comportamiento fue considerado sospechoso, lo que motivó a los efectivos a investigar más a fondo el vehículo.

Al inspeccionar la furgoneta, los agentes encontraron un volumen considerable de cable de cobre, que se presume es parte de las líneas aéreas de telecomunicaciones que han sido cortadas ilegalmente. La Guardia Civil señaló que este método es típico de organizaciones delictivas que operan en la región.

La investigación no se detuvo ahí; ante la creciente sospecha de que los criminales habían ocultado más material en la zona, se realizó una búsqueda adicional en los alrededores. Este esfuerzo resultó en el hallazgo de numerosas piezas de cable que estaban preparadas para ser recogidas posteriormente.

En total, se recuperaron 3.000 metros de cable, lo que equivale a 2.000 kilos. Después de la detención de los ocho sospechosos, fueron presentados ante el Juzgado de Instrucción de Vitigudino, donde se decidió su liberación bajo ciertas condiciones legales.

Las autoridades competentes han recordado que la labor de la Guardia Civil en Salamanca incluye la vigilancia y prevención del robo de cableado de cobre, un problema que afecta significativamente a las infraestructuras de comunicaciones y electricidad en la provincia.