El consejero de Economía y Hacienda y portavoz de la Junta de Castilla y León, Carlos Fernández Carriedo, ha salido al paso de las acusaciones vertidas contra una granja porcina en Quintanilla del Coco, en Burgos. Según el Observatorio de Bienestar Animal (OBA), esta granja estaría involucrada en posibles delitos de maltrato animal y estafa continuada. Sin embargo, Fernández Carriedo ha anunciado que los técnicos de la Junta visitaron la explotación y no encontraron irregularidades que justificaran la apertura de un expediente sancionador.
En una rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, el portavoz de la Junta ha defendido la calidad de los productos agroalimentarios de Castilla y León. "Venimos viendo que desde determinadas instancias ideológicas siempre intentan hablar mal de los productos de Castilla y León, mal de la carne de Castilla y León", ha denunciado. De esta manera, ha querido dejar claro que los productos de la región cumplen con todos los requisitos de calidad exigidos.
Sobre las imágenes difundidas por el OBA, que según el consejero de Empleo, Mariano Veganzones, no se corresponden con la explotación en cuestión, Fernández Carriedo ha subrayado que esa cuestión se deberá resolver en el proceso judicial que ya ha sido iniciado. "Será en ese contexto donde se determine el contenido de esas imágenes, cómo han sido captadas y si son realmente de esa explotación o de otro lugar", ha afirmado.
El portavoz también ha destacado que las inspecciones a las explotaciones ganaderas son periódicas y ha prometido que si se encuentran irregularidades graves en este caso, la Junta se personará en el proceso judicial. "En Castilla y León somos muy rigurosos en esta materia, contamos con excelentes profesionales y si alguien no cumple, será objeto de sanción y será una excepción", ha asegurado. Además, ha mostrado su respaldo al sector agroalimentario, que actualmente atraviesa una situación difícil.
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