En Burgos, el concejal de Medio Ambiente, Carlos Niño, ha defendido el uso de carabinas para combatir la plaga de palomas en la ciudad, citando informes jurídicos que respaldan esta práctica en respuesta a la denuncia del PACMA.

Según Niño, el problema de las palomas es uno de los más urgentes debido a los problemas de limpieza y enfermedades que estas aves pueden causar.

A pesar de que el Ayuntamiento realiza controles con métodos tradicionales, algunos tipos de palomas no responden a estos métodos, lo que llevó a la adopción de medidas como el uso de carabinas, tras confirmar su legalidad.

El Ayuntamiento ha recabado todos los informes legales pertinentes, incluyendo la autorización de la Junta de Castilla y León para el uso de carabinas como medio efectivo de control poblacional.

Niño asegura que no se busca la caza indiscriminada de palomas, sino encontrar un equilibrio en la población de estas aves en la ciudad.

En cuanto a la propuesta del PACMA de utilizar pienso esterilizante, Niño argumenta que podría afectar a otras especies de aves debido a la diversidad existente en Burgos.

Todas las medidas se llevarán a cabo siguiendo un protocolo específico y se detendrá el uso de carabinas si se determina que no es legal, enfatizando que su uso es limitado y concreto, no una acción indiscriminada.