El Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León ha ratificado la sentencia de cuatro años de prisión dictada contra un hombre por la agresión sexual a una niña de 13 años en Valladolid, ocurrida en mayo de 2024. El sujeto, que se hizo pasar por conocido de la madre de la menor, la abordó en plena calle y aprovechó la situación para tocarla de manera inadecuada.

La Sala de lo Civil y Penal del TSJCyL, con sede en Burgos, ha decidido desestimar el recurso presentado por el condenado, manteniendo así el veredicto emitido en junio por la Sección Cuarta de la Audiencia Provincial. Además de la pena de prisión, se le ha impuesto una serie de restricciones que incluyen la prohibición de acercarse a la víctima o comunicarse con ella por cualquier medio durante seis años, así como la inhabilitación para trabajar en cualquier profesión que implique contacto con menores, por un periodo de siete años.

El tribunal también ha decidido privar al condenado de la patria potestad y de otros derechos relacionados con el cuidado de menores, durante un periodo de cuatro años. A su salida de prisión, deberá someterse a un régimen de libertad vigilada durante dos años y le será exigido un pago de 1.500 euros a la víctima en concepto de daño moral.

Los hechos que llevaron a esta condena revelan un patrón preocupante, dado que el agresor ya contaba con antecedentes penales relacionados con delitos similares. El 10 de mayo de 2024, siguió a la menor en un paseo de Valladolid, donde logró acercarse y hablarle, afirmando que conocía a su madre. En un acto de acoso, arrinconó a la niña contra el cristal de un comercio, tocándola de manera inaceptable hasta que un amigo de la menor llegó al lugar.

Posteriormente, el 3 de junio, la menor, que estaba en compañía de una prima de cinco años, notó que el mismo individuo la seguía una vez más. Alarmada, se dirigió a un supermercado cercano en busca de ayuda, donde el vigilante de seguridad contactó a las autoridades para reportar la situación.