Este viernes, 9 de mayo, marcará un importante capítulo en la historia ferroviaria de Valladolid con la circulación del último tren de mercancías de Renault que pasará por los pasos a nivel de Argales y La Esperanza. Esta infraestructura, que lleva operando desde hace más de un siglo, cerrará así un ciclo que comenzó en 1895.

El tren, que tiene programada una parada técnica en la antigua Estación de la Esperanza para un cambio de locomotora, será objeto de una emotiva despedida organizada por la Asociación Vallisoletana de Amigos del Ferrocarril (Asvafer). Se prevé que el convoy salga de las instalaciones de Renault alrededor de las 18:15 horas, llegando a su destino en aproximadamente quince minutos.

Durante el acto de despedida, el tren será cargado con automóviles destinados a la exportación y partirá nuevamente hacia el puerto de Muriedas en Cantabria a las 19:13 horas, según han indicado fuentes de Adif a Europa Press. Este evento simboliza no solo el adiós a un medio de transporte, sino también a una era significativa en la logística y el transporte comercial de la región.

Con esta despedida, los pasos a nivel de Arca Real y La Esperanza dejarán de ser un punto de paso para los trenes de mercancías, contribuyendo a una reducción del 25% en el tráfico de mercancías que pasa por el centro de Valladolid. Esta transformación es un paso hacia la modernización y el aligeramiento del tráfico en la ciudad.

Los trenes de Renault se desviarán hacia la variante de mercancías que conecta con el ramal Este, permitiendo el enlace en dirección norte hacia Venta de Baños, en Palencia. Este cambio representa un avance significativo en la primera fase de la nueva variante, que proporcionará una solución más eficiente para el transporte de mercancías.

Aún queda por finalizar el enlace en dirección sur, que requiere la construcción de un viaducto sobre la carretera de Madrid. Estas obras, previstas para ser ejecutadas en 2026, encontraron dificultades debido a la actividad continuada en la vía de Ariza, que ahora dejará de funcionar para transporte ferroviario.

La línea Valladolid-Ariza fue inaugurada el 2 de enero de 1895 y clausurada al tráfico de pasajeros el 1 de enero de 1985, quedando exclusivamente para mercancías. Este último tramo experimentó muy poco tráfico hasta su cierre efectivo en 1993, limitándose desde entonces a la conexión entre Valladolid-Campo Grande y La Carrera, el cargadero para Renault, tal como se documenta en la obra 'El ferrocarril Valladolid-Ariza' de Pedro Pintado Quintana.