Rector de la USAL acusa al CEEI de parcialidad y defiende campaña de difamación.

El rector de la Universidad de Salamanca, Juan Manuel Corchado, ha presentado un extenso informe de 55 páginas titulado 'En respuesta para garantizar mis derechos', en el que se defiende de lo que él denomina como "una campaña de difamación sistemática impulsada por intereses personales y no por una verdadera preocupación por la ética científica".

Corchado ha salido al paso de las acusaciones que señalaban una supuesta adulteración de su currículum con una cantidad exagerada de citas con el objetivo de mejorar su posición en el ámbito universitario. A su vez, se ha insinuado que recurrió a técnicas como la autocita o la creación de perfiles falsos para ser citado.

El Comité Español de Ética de la Investigación, establecido en 2023 y dependiente del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, ha llevado a cabo una revisión de los logros académicos de Corchado y ha emitido un informe para evaluar si su actuación ha sido ética o no.

El rector de la Universidad de Salamanca ha señalado que la "manipulación mediática" coincidió con momentos cruciales de su candidatura al rectorado y los primeros meses de su mandato. Ha afirmado que estos ataques forman parte de una estrategia para desacreditarlo y forzar su salida.

Corchado ha resaltado que el Consejo de Gobierno de la USAL ha cumplido con la recomendación del CEEO de llevar a cabo una investigación externa e independiente, supervisada por Salvador Rus Rufino. Aunque no ha dado su opinión sobre los resultados, sí ha asegurado que revisó con detalle todos los temas mencionados en la prensa y proporcionó pruebas.

El rector ha denunciado que la "campaña de desprestigio" en su contra ha resultado en suplantación de identidad, amenazas y violación del derecho a la protección de datos personales. También ha informado que se ha suplantado su identidad en redes académicas y publicaciones, lo que ha sido denunciado a la Policía Nacional.

En relación a las acusaciones de malas prácticas, Corchado ha asegurado que él y su equipo revisaron sus publicaciones y reportaron errores de edición a la editorial Springer.

Corchado ha criticado la actuación del CEEI, acusándolo de haber actuado como un órgano instructor al solicitar un informe bibliométrico a investigadores de la Universidad de Granada. Asimismo, ha cuestionado la parcialidad de algunos miembros del Comité, incluido su presidente, Jordi Camí.

El rector ha rechazado las conclusiones del informe de los investigadores de la Universidad de Granada, argumentando que presenta graves deficiencias y sesgos, además de no haberle dado la oportunidad de defenderse.

Corchado ha expresado su descontento por considerar que el informe se basa en información de Retraction Watch y plantea dudas sobre la validez de su perfil en Google Scholar, señalando que existe uno nuevo incompleto que no es legítimo.

Por otro lado, el rector ha defendido la organización de congresos por parte de su equipo y ha negado acusaciones de falta de ética en cuanto a la recepción de citas de su entorno cercano, afirmando que esto es común en la comunidad científica.

Finalmente, Corchado ha reiterado que ninguna de las acusaciones en su contra constituye un delito y ha afirmado que estos intentos de desprestigio no afectarán su labor como rector, asegurando que la Universidad de Salamanca merece un futuro prometedor a pesar de los obstáculos.