Un segundo celador del Servicio de Urgencias de Atención Primaria (SUAP) de Astorga (León) se ha unido al encierro que comenzó el martes pasado Víctor Manuel Pérez Álvarez, quien también está llevando a cabo una huelga de hambre como protesta por no recibir el pago correspondiente por trabajar en noches y días festivos en jornadas ordinarias de 17 o 24 horas. Pérez considera que esto es un robo de derechos que la justicia permite.

El segundo celador involucrado es Fernando Fernández Castaño, quien, en un video enviado a Europa Press, explicó que su demanda es justa y necesaria, ya que no está pidiendo nada exorbitante. Espera que con esta protesta se reconozca lo mismo que se está otorgando a otros sin tener que recurrir a los tribunales. Han presentado una reclamación ante la Justicia para obtener el pago de las noches y los festivos, pero la Consejería de Sanidad de la Junta de Castilla y León se lo niega.

Hace más de cinco años, diez celadores solicitaron el pago de estas remuneraciones por noches y festivos, y tres de ellos presentaron una denuncia por la vía del Contencioso Administrativo, obteniendo una resolución favorable. "Lo ganaron y nosotros, en ese momento, no denunciamos por circunstancias económicas, nos acogimos a eso, a que había una sentencia", explicó Pérez a Europa Press el martes pasado.

Los demás trabajadores afectados intentaron obtener la misma resolución sin acudir al Contencioso Administrativo, pero la juez lo denegó argumentando que querían aumentar su patrimonio, por lo que fueron instados a acudir al Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León. Sin embargo, también se les negó esta solución porque la reclamación no superaba los 15.000 euros, por lo que volvieron al Contencioso, donde se les dijo que habían excedido el plazo.

A partir de entonces, hubo negociaciones a nivel político, inicialmente con el gerente del Sacyl en ese momento, Manuel Mitadiel, de Ciudadanos. Sin embargo, durante el proceso electoral, Ciudadanos abandonó el gobierno, por lo que posteriormente se retomaron las conversaciones con el Partido Popular, aunque hasta ahora no ha habido una respuesta. Sin embargo, han recibido apoyo por parte de la Unión del Pueblo Leonés, que ha presentado una propuesta en las Cortes de Castilla y León en este sentido.

Pérez señaló que le dio tiempo hasta después del verano para obtener alguna respuesta, y si no la obtenía, se encerraría y comenzaría una huelga de hambre. Y aquí está, poniendo en peligro su vida, después de haber sufrido un infarto y un ictus, pero decidido a llegar hasta el final con esta protesta.