VALLADOLID, 17 de noviembre - La Policía Municipal de Valladolid se prepara para participar en una significativa campaña de vigilancia y control del transporte escolar, la cual comienza este lunes 18 de noviembre y se extenderá hasta el día 22. Esta iniciativa es promovida por la Dirección General de Tráfico (DGT), y busca fortalecer los mecanismos de seguridad en el transporte de los más pequeños.

A lo largo de estos días, los agentes de la Policía Municipal llevarán a cabo exhaustivas inspecciones en los vehículos destinados al transporte escolar. Esto incluye la verificación de las autorizaciones y documentos pertinentes, así como el control de las condiciones técnicas de los vehículos y sus elementos de seguridad, tales como cinturones de seguridad y sistemas de retención infantil.

Además, se prestará especial atención a los conductores encargados de estos vehículos. Los agentes comprobarán que cuenten con su correspondiente permiso de conducción, así como el Certificado de Aptitud Profesional (CAP). También se llevarán a cabo controles para verificar los tiempos de conducción y los períodos de descanso, así como pruebas de alcoholemia y detección de sustancias estupefacientes, como ha informado el cuerpo local en un comunicado hecho público a través de Europa Press.

El propósito fundamental de esta campaña es garantizar que el transporte escolar en Valladolid sea “seguro” y “fiable”. A través de un seguimiento riguroso y el control estricto de las empresas de transporte, se busca asegurar que se cumplan todas las normativas establecidas para este sector esencial.

Adicionalmente, la campaña pretende resaltar la “importancia” que el transporte escolar tiene en el entorno urbano, especialmente en áreas donde se concentra la mayor cantidad de centros educativos. Este aspecto es fundamental, dado que la seguridad en el transporte de los niños debe ser una prioridad innegociable.

Las acciones de control y vigilancia permitirán a las autoridades obtener una perspectiva más clara sobre la incidencia y evolución de los distintos factores que inciden en el transporte escolar. Estos esfuerzos son cruciales para contribuir de manera decisiva a la reducción de la potencial siniestralidad que podría presentarse en este contexto.

En relación a la seguridad de los niños, la Policía ha recordado un dato alarmante: el 90% de los accidentes ocurridos durante el transporte escolar tiene lugar en el momento en que los menores suben o bajan del vehículo, o en los instantes inmediatamente posteriores. Muchos de estos incidentes son causados por distracciones, ya sea de los niños, de los conductores de transporte escolar o de los acompañantes. Por ello, la vigilancia se torna aún más esencial para salvaguardar la integridad de nuestros pequeños durante su trayecto escolar.