La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) ha presentado una denuncia por presunta prevaricación contra el Gobierno de la Junta de Castilla y León en un escrito registrado en la Fiscalía General del Estado. Solicitan que se realicen las diligencias necesarias para esclarecer los hechos relacionados con la declaración de la Pirámide de los Italianos en Burgos como Bien de Interés Cultural (BIC).

Emilio Silva, presidente de la ARMH, ha expresado su opinión al respecto, indicando que no se debe glorificar a quienes llegaron a España para respaldar un golpe de Estado y asesinar a quienes defendían la democracia. Considera que los fascistas italianos que apoyaron a Franco no merecen ningún tipo de reconocimiento en una sociedad democrática.

Según Nieto, la intención de la Junta de Castilla y León es buscar honrar a estos individuos de manera inapropiada, lo que equivale a ensalzar el sufrimiento de sus víctimas. Añadió que sería incomprensible que se usara dinero público para erigir o proteger un monumento en memoria de un grupo terrorista, ya que una sociedad democrática no debería celebrar la destrucción de la democracia.

Nieto ha señalado que en ningún momento el Gobierno autonómico ha tratado de realizar una investigación imparcial, sino simplemente buscar la forma de oficializar una decisión que ya estaba tomada previamente. En este caso, se trata de conservar y difundir un "monumento funerario en homenaje a las tropas italianas que acudieron en apoyo al golpe de estado de Franco en 1936".