Carnero justifica la suspensión "prudente" de obras en la iglesia de la Antigua a pesar de recibir un informe positivo.
El pasado 22 de mayo, en Valladolid, el alcalde Jesús Julio Carnero ha decidido suspender la actuación prevista para este jueves del espectáculo 'Quasimodo/Esmeralda' que formaba parte del Festival de Teatro y Artes de Calle (TAC), a pesar de contar con un respaldo jurídico que avalaba su realización. Carnero argumentó que esta decisión estaba guiada por un principio de "total prudencia".
En declaraciones a Europa Press, Carnero aclaró que la controversia surgió en torno a la utilización de los muros y la torre de la iglesia de Santa María de la Antigua, lo que generó críticas tanto en redes sociales como en medios de comunicación, especialmente por parte de la Asociación por el Patrimonio de Valladolid y diversos partidos de la oposición.
Aunque el Ayuntamiento había autorizado previamente el espectáculo según un informe legal de la Fundación Municipal de Cultura, Carnero decidió suspender la representación basándose en la controversia que había surgido ese mismo día sobre la necesidad de permisos para utilizar un espacio patrimonial tan significativo.
El alcalde explicó que el Consistorio optó por esta dirección con el objetivo de prevenir cualquier contratiempo o decisión que pudiera no ser considerada prudente. El informe jurídico que sostenía la viabilidad del espectáculo había sido previamente enviado al Arzobispado de Valladolid, que supuestamente había otorgado su consentimiento para la realización del evento.
A pesar de que Carnero considera que no es necesaria la autorización de la Delegación de Patrimonio de la Junta, reafirmó que la decisión de cancelar el evento se tomó como parte de un enfoque prudente para salvaguardar el patrimonio. "Nuestro patrimonio es sagrado,” subrayó el regidor, poniendo de relieve las acciones recientes del Ayuntamiento para preservar lugares históricos en la ciudad.
El alcalde admitió no tener la certeza sobre la necesidad de permisos, pero enfatizó que el informe legal indicaba que no era obligatorio. Según él, la representación no implicaba anclajes permanentes y seguía un patrón habitual en otras localidades tanto en Francia como en Italia. Sin embargo, ante la 'polémica', la medida de suspender la obra fue considerada la más apropiada.
Carnero defendió que, a pesar de que se podrían haber llevado a cabo las funciones sin afectar al patrimonio, se tomó la decisión de proteger el bien histórico en lugar de arriesgarse a futuros problemas. En otro orden de cosas, también mencionó que desconocía la situación de limpieza de la torre de La Antigua, aunque consideró este aspecto como algo secundario en la discusión actual.
Tags:
Categoría:
Newsletter
Entérate de las últimas noticias cómodamente desde tu mail.