El próximo 25 de septiembre se celebrará en la Audiencia de Valladolid el juicio de un recluso, Iván C.R., que se enfrenta a una condena global de casi veinte años de cárcel. La Fiscalía de Valladolid acusa a este individuo de haber salido de permiso penitenciario en diciembre de 2022, para luego dirigirse a Valladolid y robar a una empleada de una inmobiliaria.

Según el escrito de acusación, el acusado se presentó en la inmobiliaria Iberfinca de Valladolid para concertar una cita para visitar un piso en alquiler. Una vez dentro del inmueble, abordó a la empleada de forma sorpresiva y la maniató, amenazándola y exigiéndole colaboración. Durante el asalto, el acusado se apoderó del maletín de la agente inmobiliaria, donde encontró una tarjeta de crédito y 50 euros en efectivo. También consiguió que la víctima le revelara el número PIN de la tarjeta. Posteriormente, el acusado abandonó el lugar con los objetos sustraídos y utilizó la tarjeta para realizar varios reintegros en un cajero automático cercano.

Horas después, el acusado regresó al inmueble y liberó a la empleada, tras advertirle que no debía denunciar lo sucedido ni al banco ni a la policía. Sin embargo, la víctima presentó una denuncia en comisaría y recibió varias llamadas del asaltante utilizando el teléfono móvil de la agencia. La detención de Iván C.R. se llevó a cabo más tarde, cuando las autoridades montaron un dispositivo de vigilancia y lograron localizarlo y arrestarlo.

El recluso se enfrenta a múltiples cargos, entre ellos detención ilegal, lesiones, robo con violencia e intimidación, estafa, amenazas, atentado a agentes de la autoridad, daños y quebrantamiento de condena. La Fiscalía solicita una condena de casi veinte años de prisión, diversas multas y una prohibición de aproximarse a la víctima o comunicarse con ella durante veinte años. Además, se solicita una indemnización a favor de la víctima por lesiones, secuelas y el valor del dinero robado con la tarjeta de crédito.