Crónica Castilla y León.

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IGC alerta sobre la falta de personal del Seprona en Castilla y León que impide una respuesta efectiva.

IGC alerta sobre la falta de personal del Seprona en Castilla y León que impide una respuesta efectiva.

VALLADOLID, 21 Jul. — La independencia y profesionalismo de la Guardia Civil está en el centro del debate en Castilla y León, donde la Asociación Independientes de la Guardia Civil (IGC) ha alertado sobre la preocupante reducción de efectivos del Seprona. Este fenómeno se torna especialmente grave en una comunidad tan extensa y con un fuerte compromiso hacia la protección del medio ambiente, lo que plantea serias dificultades en la vigilancia y respuesta ante emergencias naturales.

De acuerdo con lo que ha revelado IGC, provincias como Salamanca, Palencia y Zamora se encuentran en una situación crítica, con apenas 20 a 25 agentes del Seprona disponibles para hacer frente a una vasta área que abarca cientos de municipios y miles de kilómetros cuadrados de naturaleza. Esta falta de personal especializado pone en riesgo la efectividad en la protección y seguimiento del medio ambiente.

Las cifras son alarmantes: en Salamanca hay solo 20 guardias del Seprona, en Zamora cuenta con cerca de 25 efectivos, en Palencia se reportan 20, León tiene 35, y Burgos alrededor de 25, según un comunicado oficial de la asociación difundido a través de Europa Press.

Daniel Fernández, vicepresidente de IGC, ha expresado su preocupación enfatizando que el actual modelo operativo no se ajusta a las realidades y necesidades contemporáneas. Aseguró que no es viable asegurar una vigilancia ambiental adecuada ni reaccionar de manera efectiva ante incendios o infracciones ecológicas con la cantidad de recursos humanos tan limitada.

Además, IGC ha planteado un serio cuestionamiento sobre la falta de actualización en el catálogo de puestos del Seprona, el cual no ha sido revisado en un periodo considerable, a pesar del crecimiento en la normativa ambiental y tecnológica. Fernández ha señalado que, aunque la presión legislativa para proteger el entorno ha aumentado de manera notable, los recursos destinados a esta ofensiva no han crecido en igual medida.

El portavoz también advirtió que las Unidades del Seprona están sobrecargadas, con un equipo envejecido y extensas áreas donde no pueden patrullar adecuadamente. A pesar de lo anterior, IGC ha destacado el esfuerzo del Ministerio del Interior mediante el Plan Soria, que busca implementar videovigilancia en áreas despobladas, aunque aclaran que estas tecnologías no deben reemplazar la presencia física de los agentes en el terreno.

Fernández ha enfatizado que "las cámaras no apagan incendios, no denuncian vertidos ilegales y no rescatan animales en peligro", lo cual resalta la importancia de contar con un número adecuado de guardias civiles en la zona, equipados y organizados de manera efectiva.

Ante esta preocupante situación, la IGC propone una reforma integral de la estructura operativa del Seprona y del cuerpo en áreas rurales. Esto incluiría un aumento en el número de efectivos por provincia, la consolidación de pequeños destacamentos en bases más robustas y recursos bien equipados, así como un plan de renovación de personal y mejoras logísticas para destinos de difícil cobertura.

En conclusión, Fernández ha afirmado que "Castilla y León necesita una Guardia Civil moderna, capaz de defender su valioso patrimonio natural con eficacia, buenos recursos y estabilidad". La llamada a la acción no podría ser más clara: es crucial garantizar que el compromiso con la protección ambiental se traduzca en acciones concretas y recursos adecuados.