VALLADOLID, 28 de agosto. El portavoz de la Junta de Castilla y León, Carlos Fernández Carriedo, ha defendido con firmeza el trabajo del consejero de Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, ante la grave crisis de incendios forestales que afecta a la comunidad. Fernández Carriedo ha destacado la complejidad de la situación, que ha persistido durante tres semanas sin poder ser controlada por completo.

En una reciente conferencia de prensa tras el Consejo de Gobierno, el portavoz manifestó el pleno apoyo del Ejecutivo regional y de su presidente, Alfonso Fernández Mañueco, hacia Suárez-Quiñones. Este respaldo se da en medio de las críticas y llamados a su dimisión debido a su manejo de la emergencia incendiaria.

Fernández Carriedo subrayó que el consejero se encuentra “en primera línea” de las operaciones, incluyendo su participación en la dirección del Cecopi autonómico. Además, hizo hincapié en que la Junta ha triplicado los recursos destinados a la prevención de incendios desde el año 2022 y ha prolongado los contratos de los trabajadores del operativo, mejorando sus condiciones laborales en el marco del Diálogo Social.

El portavoz también resaltó la profesionalidad y la preparación del equipo encargado de enfrentar esta crisis. “Castilla y León puede estar orgullosa de la cualificación de sus profesionales en materia de incendios. Es natural que surjan críticas en este tipo de situaciones, pero pienso que contamos con los mejores expertos a nivel nacional”, afirmó.

En relación a la prolongada lucha contra los incendios, Fernández Carriedo resaltó el “intenso trabajo” realizado por Suárez-Quiñones, que ha dirigido los esfuerzos frente a un problema de “extraordinaria dificultad”. Esto se menciona en el contexto de la persistencia de incendios activos, como el de Fasgar, que ha alcanzado el nivel 2 de gravedad.

“Hemos movilizado todos los recursos a nuestra disposición y, lamentablemente, aún no hemos podido controlar uno de estos fuegos. Esto pone de manifiesto el reto formidable que enfrentamos”, agregó, reconociendo que todas las administraciones implicadas han dado lo mejor de sí en la lucha contra el fuego. En este sentido, incluyó a la Junta, el Gobierno de España, las diputaciones provinciales, los ayuntamientos y otras comunidades autónomas, así como a países de la Unión Europea que han colaborado a través del Mecanismo de Solidaridad en Protección Civil.