La Junta de Castilla y León, Repsol y la Federación Empresarial Castellano y Leonesa de Transporte en Autobús (Fecylbus) han anunciado un proyecto piloto para utilizar diésel 100% renovable en catorce vehículos de transporte interurbano durante los próximos cuatro meses. El objetivo del proyecto es promocionar el uso de combustibles renovables en la flota de autobuses interurbanos sin necesidad de modificar motores o infraestructuras de distribución. Este proyecto evitará la emisión de 415 toneladas de CO2 a la atmósfera y afectará a 32 rutas con un recorrido total de 450,000 kilómetros.
La firma del convenio se llevó a cabo en un acto presidido por la Consejera de Movilidad y Transformación Digital, María González Corral, y contó con la participación de representantes de Repsol, Fecylbus y las siete compañías de transporte que se sumaron al proyecto. Los autobuses utilizarán diésel renovable producido a partir de residuos orgánicos como aceites vegetales, grasas animales y residuos forestales y agrícolas.
El objetivo de este proyecto es contribuir a la mejora de la calidad del medio ambiente, en línea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU y las metas de la Unión Europea. Además, se pretende demostrar que la descarbonización no se limita a la electrificación, sino que existen otras opciones viables como los biocombustibles avanzados.
Repsol, que fabrica y comercializa biocombustibles desde hace más de 20 años, ha invertido en plantas de producción de combustibles renovables en Bilbao, Cartagena y Puertollano. Además, tiene previsto inaugurar antes de fin de año las dos primeras estaciones de servicio en Castilla y León que ofrecerán combustible renovable.